Por GUILLERMO COTTON
Recuerdo una caricatura en la que se presentaba un mártir moderno
siendo atado a una hoguera. Un clérigo, de tendencias muy
liberales, le exhortaba: "¡Coraje! Acuérdese que quizá haya algo
de verdad en esos mitos de la vida después de la muerte". La
ironía es manifiesta; sin la esperanza en la vida venidera, todo
martirio sería muerte una vana y torpe. Pablo afirma, "si en esta
vida solamente esperamos en Cristo, somos los más dignos de
conmiseración de todos los hombres" (1 Co.15:19). La esperanza
cristiana mira más allá de las cosas tangibles, hacia "la ciudad
que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios"
(He.11:10).
En Hebreos 11:1 tenemos una definición de la fe en términos de la
esperanza: Es pues la fe la certeza de lo que se espera. La fe y
la esperanza están firmemente ligadas y en algunos contextos casi
llegan a ser sinónimos. La fe esta orientada hacia el futuro.
El escritor de Hebreos en el capítulo 11 subraya que en los
tiempos pasados los héroes de la fe se apoyaron sólo en las
promesas divinas, sin ninguna evidencia tangible de que esas
promesas iban a ser cumplidas; pero tanta credibilidad daban a
éstas que regulaban toda su vida en base a ellas. Las promesas
hablaban de una condición futura, pero eran para ellos tan
seguras que actuaban como si estuvieran ya presentes. Miraremos a
algunos de estos héroes.
ABRAHAM, v.v.8:19.
Cuando éste salió de Ur de los Caldeos, no sabía hacia dónde iba,
sólo sabía que Dios iba a guiar sus pasos. Su único refugio era
la promesa divina de guiarle y proveer todo lo necesario para
enfrentar tan arriesgado viaje. Si bien llega a la "tierra
prometida, nunca logra poseerla; sin embargo para Abraham la
promesa divina era tan sólida como su cumplimiento. El secreto de
la loca hazaña en que se embarcó residía en que Dios le tenía
prometida era un símbolo de la ciudad celestial, `la ciudad que
tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios'" (v.10)
Por lo cual vivía en la tierra prometida como extranjero, nunca
recibiendo el pleno cumplimiento de las promesas en carne propia,
pero mirándolo lejos, saludándolo y confesando que era extranjero
y peregrino sobre la tierra (v.13). Como tal, Abraham es el
prototipo de la vida de fe y esperanza, porque su fe le daba
plena certeza de lo que esperaba.
Luego Dios le prometió un hijo heredero, aunque él y su mujer ya
eran de edad avanzada como para esperar un hijo. Pero Abraham
"aunque no había esperanza, creyó y tuvo esperanza, y así vino a
ser `padre de muchas gentes', conforme a lo que Dios le había
dicho…(porque tuvo) la plena seguridad de que Dios tiene poder
para hacer todo lo que promete" (Ro.4:18-21 en Versión Popular).
Otra ve creyó en lo humanamente imposible, en una loca hazaña,
apelando sólo a la promesa divina.
Abraham demostraba una fe inconmovible e indómita en las promesas
divinas. Cuando Isaac ha llegado a ser joven, Dios manda a
Abraham que se lo entregue en sacrificio. Si las promesas divinas
de una descendencia iban a cumplirse, Isaac era único e
irreemplazable. Si Isaac muriese ¿Cómo podría cumplirse en la
promesa? ¿Cómo podría reconciliar la promesa con este nuevo
mandamiento? Para Abraham ese era un problema de Dios. su propia
responsabilidad era clara, y no dudó de que Dios cumpliría su
promesa. Llevó a Isaac para ofrecerlo, "pensando que Dios es
poderoso para levantar aún de los muertos" (He.11:19). Aún si
Isaac muriera, Dios podría levantarlo.
MOISES, v.v.23:27
Moisés a los 40 años tomó el paso radical y peligroso de repudiar
su alto rango de príncipe, de rechazar los deleites que tal
posición le podría brindar, y de rehusar los tesoros de Egipto
que estaban a su alcance. Por otro lado aceptó y abrazó la
compañía de una tribu incalificable de esclavos, para ser
maltratado y vituperado con ella. ¿Cuál fue el secreto de su
decisión?. Nos explica el autor: "tenía puesta la mirada en el
galardón".
Miraba más allá de las cosas tangibles, de los deleites
temporales del pecado, hacia el más allá, al premio que Dios le
daría. Esto simple y llanamente, era el secreto de toda su vida.
Su fe era la certeza de lo que esperaba, y su esperanza no estaba
cifrada en las cosas materiales; sino que con Pablo podría decir:
"no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se
ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se
ven son eternas" (2 Co.4:18).
LOS CAIDOS, v.v.35-36
Vivimos en dias de triunfalismo. Se nos presenta la fe como
siempre victoriosa, una fe que no nos ha de costar nada.
Es cierto que nuestro autor delínea la victoria de muchos que
"conquistaron reinos…sacaron fuerzas de la debilidad, se
hicieron fuertes en batallas, pusieron en fuga ejércitos
extranjeros" (v.35 ss.); pero también nos presenta un cuadro
doloroso de otros que "experimentaron vituperios y
azotes…prisiones y cárceles…apedreados, aserrados, puestos a
prueba, muertos a filo de espada…etc."; y estos caidos en la
lucha son tanto héroes de la fe como los otros.
Tenían un
secreto: "fueron atormentados, no aceptando el rescate, afin de
obtener mejor resurrección". Como Abraham, esperaban la ciudad de
Dios; como Moisés tenían puesta la mirada en el galardón; como
Pablo, no miraban a las cosas que se ven, sino a las que no se
ven.
JESUS v.v.12:1-2
Uno de los grandes peligros de la división de la Biblia en
capítulos es que inevitablemente pensamos que el nuevo capítulo
indica un cambio de tema, pero muchas veces no es así. Jesús es
uno de los héroes de la fe. Como decía un escrito puritano:
"Jesús es el mejor creyente que jamás haya vivido". ¿Cuál fue el
secreto de su fe? La esperanza.
"Por el gozo puesto adelante de
él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se asentó a la
diestra del trono de Dios". Al confrontarse con la necesidad de
la cruz, Jesús miraba más allá del sufrimiento y vio que le
esperaba la bienvenida en la presencia de Dios, el gozo del "bien
hecho" de su Padre; y poniendo su mirada en el galardón,
menospreció el oprobio.
Pablo nos dice que como creyentes, nos hemos vestido "con la
coraa de fe y amor, y con esperanza de salvación como yelmo" (1
Ts.5:8). Allí está la esencia del asunto. "Todos los que quieren
vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución"
(2 Ti.3:12), pero la esperanza es el yelmo que nos protege de los
golpes.
El yelmo era una pieza muy importante de la armadura
antigua; su función era la de proteger la cabeza, como ocurre
también con el caso del motociclista moderno. Dice Dr. James
Denney en su comentario de este texto: "Sin esperanza ningún
hombre puede jamás levantar su cabeza en la batalla; y la
esperanza cristiana es siempre, el regreso de Cristo.
Si él no ha
de regresar, la misma palabra `esperanza' debe ser borrada del
Nuevo Testamento". Y con su venida está la certeza de que "las
aflicciones del tiempo presente son comparables con la gloria
venidera que en nosotros ha de manifestarse". (Ro.8:18).
Hermanos en este tiempo debemos como dice nuestro hermano ponernos ese casco de la palabra en nuestra mente y recordar sus promesas y sus imperativos de su palabra como el de huye de las paciones, venid en pos de mi, porque nuestra ciudadanía no esta aquí, esta en los Cielos.
Hermanos miremos en esta vida hacia nuestra meta y cuidemos de nuestra salvación.
espero que me sigan mandando este material ya que es una erramienta muy buena para la congregacion la cul el señor me a puesto muchas gracias que el eteno los siga bendiciendo
con cristo en mi vida, conoci el real sentido de vivir , el me quito la ansiedad que angustiaba mi vida me di cuenta de la real importacia de las cosas que no se ven, mi vida no la quiero vivir sin DIOS a mi lado, tengo la certeza que conforme a su voluntad el me dara lo que en oracion le solicito un padre siempre sabe lo que es bueno para su hijo
y el mio es el dueño del mundo.papito
gracias por rescatarme de la osuridad
tu hija
GRACIAS POR LOS MENSAJES UNO SE SIENTE FORTALECIDO Y NOS DA LA OPORTUNIDAD DE RENOVARNOS EN NUESTRA FE, EN ESTA LUCHA DIARIA POR SER FIEL, VIVIR EN SANTIDAD, Y PODER SER DE BENDICION A OTROS QUE COMO NOSOTROS HOY LLEGAN A BUSCAR UNA SALIDA. LOS FELICITO POR LA INICIATIVA DE QUERER BENDECIRNOS UN ABRAZO EN JESUS
CARLOS BELIZAN
gracias a Dios por este material, es de grande
bendicion para nestras vidas. bueno para la mia lo es que el senor los siga bendiciendo.
GRACIAS…………
DIOS LOS BENDIGA!