MERVIN BRENEMAN
En toda la plétora de recientes investigaciones, libros y artículos escritos sobre la enseñanza bíblica respecto a la pobreza y la riqueza se destaca la ausencia de la literatura sapiencial. De vez en cuando aparece una u otra cita de Proverbios o Eclesiastés, pero son pocas y no aparecen investigaciones a fondo en estos escritos.
Generalmente se cree que los sabios de Israel atribuyen la riqueza a la vida recta o la bendición de Dios, mientras los pobres son así por su propia culpa, por su pereza o su impiedad. De modo que un libro como Proverbios no tiene nada tiene que decir a los problemas sociales nuestros, más bien es alienante porque defiende al status quo. ¿Pero es cierto este juicio un tanto superficial. Fueron tales consideraciones las que motivaron esta investigación.
Generalmente se estudia el Pentateuco, los profetas y el Nuevo Testamento buscando respuestas bíblicas a la problemática social y se hace caso omiso de la literatura sapiencial. Pero si la enseñanza de los sabios era una parte importante de Israel, ciertamente tenía implicancias sociales. Si los sabios representaban una fase de la revelación de Dios (Jer.18.18), ¿tendrá vigencia también para nosotros? ¿Concuerda con la ley y los profetas o representa un enfoque ajeno? ¿Puede ayudarnos hoy para solucionar la creciente disparidad entre los pobres y los ricos? Esta ponencia empieza con una investigación de los proverbios que de alguna manera tocan la temática de la pobreza y la riqueza.
Luego, en la segunda parte, se hace un intento de ver las enseñanzas básicas de Proverbios y la luz de ellas, qué puede decirnos en cuanto a nuestra situación de inequidad donde se acentúa la distancia entre lo pobres y los ricos.
PROVERBIOS TOCANTE A LA POBREZA Y LA RIQUEZA
1. Observaciones sobre la desgracia de ser pobre.
Los sabios analizaron la vida cotidiana. Algunos proverbios nos suenan extraños y dan la impresión de que justifican la desigualdad y la opresión. Pero a menudo no representan un juicio sobre la situación sino un análisis de la situación como se encuentra.
Algunos sencillamente indican la triste condición de los pobres:
15.15 Todos los días del afligido son difíciles,
Mas el de corazón contento tiene banquete contínuo.
11.15 La fortuna del rico es su baluarte.
La miseria es el terror del pobre.
10.15 Las riquezas del rico son su ciudad fortificada
y el desmayo de los pobres es su pobreza.
Los sabios también reconocieron los efectos sicológicos-sociales de la pobreza por un lado y la riqueza por otro. Los proverbios que siguen no dan juicio sobre lo correcto o justo de la situación; sencillamente observan cómo son las cosas:
19.4 Las riquezas traen muchos amigos;
Mas el pobre es apartadado de su amigo.
19.7 El pobre es odioso a su amigo;
Pero muchos son los que aman al rico.
11.16 La mujer agraciada tendrá honra,
Y los fuertes tendrán riquezas.
18.23 El pobre habla con ruegos,
Mas el rico responde durezas.
Estudios sociológicos indican que ciertas características que se encuentran en la gente pobre y marginada son, por lo menos en parte, resultado de la pobreza y la acompañante falta de esperanza. Por ejemplo, las investigaciones indican que niños de familias pobres generalmente tendrán menos motivación en los estudios. Los sabios observan algunas de estas características que se encuentran juntamente con la pobreza:
13.8 El rescate de la vida del hombre está en sus riquezas;
Pero el pobre no oye censuras.
22.7 El rico se enseñorea de los pobres,
Y el que toma prestado es siervo del que presta.
28.1 El hombre pobre y robador de los pobres
Es como lluvia torrencial que deja sin pan.
Estos dichos aparentemente dan un análisis frío, desinteresado del sufrimiento de los pobres, pero los mismos sabios enseñaron la responsabilidad para con los pobres (ver 4 abajo) y trataron de infundir una conciencia social (ver 5 abajo). Por cierto, hoy día, vemos estos mismos sufrimientos en escala mucho mayor de la que existía en Israel. Tanto ahora como en el contexto de los sabios uno de los primeros pasos para desarrollar una conciencia social es entender los sufrimientos y frustaciones de los pobres.
2. Algunas causas de la pobreza
Puesto que la enseñanza de los sabios enfatiza y enfoca la responsabilidad de las decisiones individuales en la vida cotidiana, el análisis de las causas de la pobreza también enfoca este aspecto.
La causa que menciona es la búsqueda de placeres.
23.20 No estés con los bebedores de vino,
Ni con los comedores de carne,
21 Porque el bebedor y el comilón empobrecerán,
y el sueño hará vestir vestidos rotos.
20.17 Hombre necesitado será el que ama el deleite,
y él que ama el vino y los ungüentos no se enriquecerá.
Otros proverbios dicen que la impiedad produce pobreza y que la riqueza es una bendición de Dios sobre los justos.
13.25 El justo come hasta saciar su alma;
Mas el vientre de los impíos tendrá necesidad.
10.22 La bendición de Jehová es la que enriquece
y no añade tristeza con ella.
10.29 El Señor es refugio para el hombre cabal,
y es terror para el malhechor.
13.18 Pobreza y vergüenza tendrá el que menosprecia el consejo;
Mas el que guarda la corrección recibirá honra.
14.23 En toda labor hay fruto;
Mas las vanas palabras de los labios empobrecen.
Proverbios pone el énfasis en la praxis. Lo que hace el hombre tiene valor y el trabajo es una responsabilidad seria. De modo que hay muchos proverbios que enfatizan las consecuencias de la irresponsabilidad y pereza.
6.6 Ve a la hormiga, oh perezoso,
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
9 Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir?
¿Cuándo te levantarás de tu sueño?
10 Un poco de sueño, un poco dormitar,
y cruzar por un poco las manos para reposo,
11 Así vendrá tu necesidad como dominante,
Y tu pobreza como hombre armado.
10.4 La mano negligente empobrece,
Mas la mano de los diligentes enriquece.
12.11 El que labra su tierra se saciará de pan
Mas el que sigue a los vagabundos es falto de entendimiento.
12.24 La mano de los diligentes señoreará;
Mas la negligencia será tributaria.
12.27 El indolente ni aún asará lo que ha cazado;
Pero haber precioso del hombre es la diligencia.
13.4 El alma del perezoso desea, y nada alcanza;
Mas el alma de los diligentes será prosperada.
18.9 También el que es negligente en su trabajo
Es hermano del hombre disipador.
19.15 La pereza hace caer en profundo sueño
Y el alma negligente padecerá hambre.
20.4 El perezoso no ara a causa del invierno,
Pedirá, pues, en la siega, y no hallará.
20.13 No ames el sueño, para que no te empobrezcas;
Abre tus ojos, y te saciarás de pan.
13.23 En el berbecho de los pobres hay mucho pan;
Mas se pierde por falta de juicio.
¿Pero no son alienantes estos proverbios? Echan la culpa al mismo pobre. No reconocen las causas estructurales que operan en la sociedad. Dijimos arriba que la enseñanza de los sabios enfoca la responsabilidad de cada individuo. Desde nuestra perspectiva este enfoque no dice todo. Muchos de los pobres no lo son por su propia pereza, ni por su propia culpa, sino por que son presos del sistema o las estructuras sociales.
A la vez tenemos que reconocer y tomar en serio la enseñanza de estos proverbios. El trabajo es importante, cada persona es responsable por el uso de su tiempo. El que trabaja y produce tendrá más posibilidades de suplir necesidades. El hecho de que estos proverbios no ofrecen un programa para cambiar los sistemas sociales opresores no es motivo de rechazar su enseñanza. Debemos tomarla en serio, pero a la vez, poner con ella otras verdades tales como el énfasis profético en la justicia.
3. El valor relativo de la riqueza
Los mismos sabios reconocieron que la riqueza era un valor relativo. Los siguientes proverbios muestran que el temor de Dios, la paz, el amor, la vida de otras personas y la sensatez son más importantes.
30.8 No me des pobreza ni riqueza;
Mantenme del pan necesario;
9 No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová?
O que siendo pobre, hurte y blasfeme el nombre de Dios.
19.1 Mejor es el pobre que camina en integridad,
Que el de perversos labios y fatuo.
19.22 Contentamiento es a los hombres hacer misericordia;
Pero mejor es el pobre que el mentiroso.
28.11 El hombre rico es sabio en su propia opinión;
Mas el pobre entendido lo escudriña.
15.17 Mejor es la comida de legumbres donde hay amor
Que de buey engordado donde hay odio.
11.7 No aprovecharán las riquezas en el día de la ira;
Mas la justicia librará de la muerte.
11.28 El que confía en sus riquezas caerá,
Mas los justos reverdecerán como ramas.
16.19 Mejor es humillar el espíritu con los humildes
Que repartir despojos con los soberbios.
17.1 Mejor es un bocado seco y en paz
Que casa de contiendas llena de provisiones.
15. Mejor es lo poco con el temor de Jehová
Que el gran tesoro donde hay turbación.
22.1 De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas.
y la buena fama más que la plata y el oro.
2 El rico y el pobre se encuentran;
A ambos los hizo Jehová.
Los sabios desprecian y condenan las riquezas adquiridas apresurada o injustamente.
13.11 Las riquezas de vanidad disminuirán;
Pero el que recoge con manos laboriosas las aumenta.
21.5 Los pensamientos del diligente ciertamente tienden
a la abundancia;
Mas todo el que se apresura alocadamente, de cierto va a la pobreza.
6 Amontonar tesoros con lengua mentirosa
Es aliento fugaz de aquellos que buscan la muerte.
22.16 El que oprime al pobre para aumentar sus ganancias,
O que da al rico, ciertamente se empobrecerá.
28.20 El hombre de verdad tendrá muchas bendiciones;
Mas el que se apresura a enriquecerse no será sin culpa.
4. La responsabilidad para con los pobres
Aunque la enseñanza de los Proverbios está dirigida hacia la responsabilidad individual, toma por sentado que el hombre vive en una sociedad y tiene responsabilidad hacia sus prójimos. Así que uno no puede quedar indiferente a la pobreza del prójimo, pues al contrario está pecando por menospreciar a su prójimo. Uno debe ayudarle al necesitado aunque éste sea su enemigo.
38.7 No te niegues a hacer el bien a quien es debido,
Cuando tuvieses poder para hacerlo.
28 No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, y mañana te daré,
Cuando tienes contigo que darle.
14.21 Hay quienes reparten, y les es añadido más;
Y hay quienes retienen más de lo que es justo, pero
vienen a pobreza.
17.5 El que escarnece al pobre afrenta a su Hacedor;
El que se alegra de la calamidad no quedará sin castigo.
19.17 A Jehová presta el que da al pobre,
y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar.
21.13 El que cierra su oído al clamor del pobre,
También el clamará, y no será oído.
22.9 El ojo misericordioso será bendito
Porque dió de su pan al indigente.
22.22 No robes al pobre, porque es pobre,
Ni quebrantes en la puerta al afligido;
23 Porque Jehová juzgará la causa de ellos
y desalojará el alma de aquellos que los despojaron.
25. Si el que aborrece tuviere hambre, dale de comer pan,
Y su tuviere sed, dale de beber agua.
22 Porque ascuas amontonadas sobre su cabeza,
y Jehová te lo pagará.
28.8 El que aumenta sus riquezas con usura y crecido interés,
Para aquel que se compadece de los pobres las aumenta
28.27 El que da al pobre no tendrá pobreza.
Mas el que aparta sus ojos tendrá muchas maldiciones.
5. Enseñanza sobre la conciencia social
Los sabios no quedaron indiferentes a los problemas sociales. Usaron los proverbios para desarrollar en la gente una conciencia social, una concientización contra la injusticia. Algunos de los proverbios que acabamos de ver abarcan tanto la sensibilidad individual como la responsabilidad en cuanto a los problemas de la sociedad. Ahora veremos otros que destacan esta conciencia de la justicia social. Los primeros se dirigen al rey, o la los líderes del pueblo.
29.4 El rey con el juicio afirma la tierra;
Mas el que exige presentes la destruye.
14 Del rey que juzga con verdad a los pobres,
El trono será firme para siempre.
28.15 León rugiente y oso hambriento
Es el príncipe impío sobre el pueblo pobre.
Otros proverbios que enseñan la justicia se dirigen a todos.
10.2 Los tesoros de maldad no serán de provecho;
Mas la justicia libra de muerte.
11.26 Al que acapara el grano, el pueblo lo maldecirá;
Mas el que tiene misericordia del pobre, lo honra.
14.31 El que oprime al pobre afrenta a su Hacedor;
Mas el que tiene misericordia del pobre, lo honra.
16.8 Mayor es lo poco con justicia
Que la muchedumbre de frutos sin derecho.
29.7 Conoce el justo la causa de los pobres
Mas el impío no entiende sabiduría.
17.23 El impío toma soborno del seno
Para pervertir las sendas de la justicia.
24.23 Hacer acepción de personas en el juicio no es bueno.
Aquí se nota una profunda conciencia social y un reconocimiento que la opresión al prójimo es una afrenta a Dios, el Hacedor del hombre.
Los deberes Cristianos se van tornando sencillos de cumplirlos cuando permitimos, que el Espíritu que Dios nos otorgó, sea llenado de su Gracia, Misericordia y Amor.
La sabiduría que viene invocar el nombre de JESÚS, es infalible y tenemos la Gracia de aplicarla para la felicidad de nuestras familias,amigos, compañeros,enemigos y de nosotros mismos.
Dios es nuestro Padre celestial y ÉL, es la máxima expresión de Amor que la mente humana puede dimensionar,
al tenerle a Dios permanentemente ocupando nuestro espíritu, nuestra mente será ocupada, para la obra que Dios, con su voluntad quiere para cada uno de nosotros.
Bendiciones
me parece muy importante el estudio biblico,sobre los pobres,pero me gustaria que se profundisara mas,sobre Prov 22:2donde dice que JEHOVA.hizo al rico y al pobre.
tambien me encantaria,si tiene algun estudio biblico,sobre los que preparan bebidas alcoholicas.
muy agradecido y que DIOS los bendiga