Entrevista a Mervin Brenman realizada por Ricardo Zandrino
Mervin impresiona a primera vista por su altura de casi dos metros, y apenas uno comienza a conversar con él y lo conoce, descubre que encierra la ternura de un niño. Doctor en estudios sobre antiguo-cercano oriente (historia, cultura, arqueología, y lenguas de medio oriente, como trasfondo para estudios del Antiguo Testamento).
Realizó su doctorado en teología en la Universidad de Wheaton. Conoció a su esposa Dana en Costa Rica, cuando él era profesor en el Seminario Bíblico Latinoamericano, y ella enfermera de un Sanatorio dependiente de dicha institución. Eran los comienzos de la década del sesenta. Actualmente tienen tres hijos: Jimy de 20, Laura de 17, y Daniel de 14. Viven en Buenos Aires donde Mervin es profesor de Antiguo Testamento en el Seminario Internacional Bautista de Teología, es además ministro de oración en la Iglesia Bautista del Centro.
R.Z. Mervin, es fácil vincular a Jesús con todas las expresiones del amor, pero uno no tiene la tendencia a pensar lo mismo cuando se refiere al Antiguo Testamento ¿Es esto correcto o en él también encontramos referencias al amor?
M.B. En el Antiguo Testamento hay mucho referido al amor. No es cierto que el Dios del A.T. es de ira y el del N.T. es de amor. Dios siempre muestra misericordia y amor a los que aceptan su gracia.
En el A.T. se usa mucho la palabra «misericordia» (jesed), y se la utiliza en relación al pacto o alianza entre Dios y su pueblo.
R.Z. Y este dista mucho de ser un pacto frío.
M.B. Exacto, hay una gran cuota de amor en él. En Nehemías 9 y en varios Salmos se hace un repaso de la historia del pueblo de Israel, y se recalca el amor de Dios a pesar de sus fallas.
R.Z. ¿También podemos afirmar que percibimos el amor de Dios en los 10 mandamientos?
M.B. Quizás a primera vista pareciera que no, pero realmente los israelitas vieron los 10 mandamientos como un regalo de Dios para tener unas sociedad sana y justa.
En Deuteronomio 6:25 dice » Y tendremos justicia cuando cuidemos de poner por obra todos estos mandamientos delante de Jehová nuestro Dios, como él nos ha mandado». En Deuteronomio 6:5 también les dice: «Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas», lo cual implica amor a Dios, y con respecto al prójimo siempre existe un compromiso de amor: Levítico 19:18 dice: «No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo.»
R.Z. ¿Qué imágenes usa Dios para ilustrar el amor que tiene por su pueblo?
M.B. En varias partes del A.T. se utiliza la imagen del matrimonio, en el cual los esposos son Dios y su pueblo. En el caso del profeta Oseas, Dios lo uso de una manera especial para mostrar esta relación de amor, porque su esposa era infiel, a tal punto que él tuvo que comprarla cuando estaba en venta como esclava prostituta, y Dios le dijo que debía seguir amándola. Este es un ejemplo de cómo Dios amaba a su pueblo aunque le era infiel.
R.Z. El libro del Cantar de los Cantares ¿apunta a esta misma figura?
M.B. Algunos lo interpretan en términos simbólicos para ilustrar la relación entre Dios y su pueblo, y puede tener algo de esto. Pero su primer sentido es la santidad del amor conyugal. Probablemente se trataba de cánticos que se utilizaban en los festejos de bodas. Es un libro dedicado al amor de la pareja humana, con la buena intención de Dios en ello.
R.Z. ¿Qué aspecto novedoso introduce Jesús al concepto de amor?
M.B. Yo diría que Jesús profundizó e interiorizó la ética que ya comienza en el A.T.. Por ejemplo Mateo 5:21-22 dice que no es suficiente no matar, ya se es culpable enojándose con el prójimo. Cuando Jesús resume los mandamientos los reduce a dos: «Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas» (Mateo 22:37-40). La ética no consiste en no hacer cosas malas, sino en amar a Dios y al prójimo, ayudar a otros , preservar la vida y ayudar al necesitado. Jesús lo demostró con sus propios hechos, y espera que sus seguidores tomen su ejemplo.
R.Z. ¿Imaginás a Jesús como una persona cálida y afectuosa?
M.B. Sí, supongo que a veces podría estar serio, pero siempre muy cariñoso. Lo vemos en la imagen en la cual Juan se reclinaba sobre él, o cuando atendía a esa pobre mujer enferma que tocó su manto. Siempre era sensible a las necesidades de cada uno.
Sin embargo debemos olvidar, que habló sobre el castigo y el juicio, pues era justo. En la cruz es donde mejor se ve la ira de Dios, allí se muestra el terrible castigo sobre nuestros pecados y su infinito amor en enviar a su Hijo a ofrecernos vida eterna.
R.Z. San Agustín dijo «ama y haz lo que quieras» ¿Es éticamente correcto este planteo?
M.B. Es éticamente correcto según la manera en que uno lo aplique: si se quiere decir que el amor es la base de toda ética, es bíblico pues lo dijo Jesús. Si en cambio se quiere implicar que con el amor no hacen falta reglas específicas, entonces se va en contra de la enseñanza bíblica porque el mismo N.T. dice en San Juan 14:21 «El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama».
Dios sabe que como seres humanos necesitamos ciertas normas directrices. Sabemos que no somos salvos por cumplir la ley, pero los mandamientos de Dios nos indican cuál es la voluntad de Dios en todas las épocas y en todas las culturas.
R.Z. ¿Cuál es el compromiso de amor que debe asumir la iglesia en América Latina en el dia de hoy?
M.B. Creo que es cuestión de aplicar lo que dijo el Señor Jesús: amar a Dios y amar al prójimo. El orden de los 10 mandamientos es también significativo: si amas a Dios, también debes amar al prójimo.
Profetas como Amós, Miqueas, e Isaías, vivían en un contexto de injusticia social bastante paralelo al nuestro.
Ellos retaron a los mismos «creyentes» del pueblo de Dios, por no amar a su prójimo desvalido y por oprimirlo indirectamente por sus decisiones económicas. Amós 6:6 «…beben vinos en tazones, y se ungen con los ungüentos más preciosos; y no se afligen por el quebrantamiento de José.». Aquí José aparece como figura de Israel.
En la iglesia de hoy debemos sensibilizarnos por el sufrimiento injusto de los que nos rodean, y actuar en consecuencia. Pero entender la situación desde una perspectiva integral incluye traerlos a la salvación por el amor de Cristo, el cual alivia el sufrimiento.
R.Z. Gracias Mervin, por conocerte, sé que sos la persona indicada para hablar de amor.
Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor.
Asi es podemos tener aun la fe mas grande incluso en toda la tierra como dijo Jesus es su palabra no e hallado tanta fe en la tierra; pero no tiene amor no sirve de nada
El amor es algo tan importante instaurado por nuestro señor que el no tenerlo en nuestras vidas, nos hace indirectamente no tenerlo a el, es algo que hace que hagamos cosas tan importantes por los demas oviando las cosas malas que quizas nos hicieron, es algo que nos hace hacer coasas increibles.
El Amor de Dios es Indescriptible,sobrepasa todo pensamiento Humano,pero si el logra q tu le prestes la atencion necesaria para enseñarte a Amar como el nos ama entonces nada sera raro o increible Dios les Bendiga
Jesús es la Luz del mundo, y es la máxima expresión de Amor que conocemos, (Génesis Cap. 1-3)
Pidámeslo a Dios la sabiduría para amarlo sobre todas las cosas, y que las añadiduras solo sean consecuencia de este Amor.
Bendiciones.
En el momento en que abrimos nuestro corazon a Jesús ,el entra con todo el amor de su padre a nosotros por eso jamas podemos decir que no comocemos el amor si lo llevamos dentro de nosotros,el transforma nuestras vidas y alli comenzamos a entender de verdad quien es Jesús»es el mas grande amor que podemos tener nosotros y nuestro primer amor por que ese amor nos los da sin pedir nada a cambio y nos sigue hasta la muerte»
A menudo se relaciona la moral o etica con un semblante adusto y rigidez, pero la etica cristiana, a mi entender, y como bien lo expresa el articulo, es aprender a amar a Dios y a nuestro prójimo, y es ahí cuando necesitamos las directrices de Dios en cuanto a como hacerlo mediante sus mandamientos que son como los rieles del tren para que por él pueda canalizar nuestro amor hacia Dios y nuestro projimo.
1 Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe.
13:2 Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.
13:3 Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.