Sr.Director:
Quiero contarle el sueño que tuve hace poco, porque además de mis habilidades y aficiones, también soy un soñador de sueños.
Yo sabía que Dios tenía un gabinete numerosísimo. Al menos escuché y leí de multitud de hombres y mujeres que se decían ministros de Dios. Tal vez por esa idea del subconsciente, y Ud. sabe más que yo de esto, me vino esa visión.
Era una reunión de gabinete, y se parecía a la realidad de un ignoto país… Allí también había un ministro que era más ministro que otros, el “superministro”, digamos.
Precisamente él era quien impulsaba toda privatización.
Como en aquel país de maravillas se habían privatizado los telefónos, las rutas, los ferrocarriles, el correo y muchas cosas más, en este país de “más allá del sol” que, siempre impulsaba la imaginación de todos los cristianos, también se iba a privatizar todo…No sólo se iba a privatizar el cielo, sino que ahora se hablaba de privatizar la puerta del cielo.
Algunos ministros pusieron el grito en… bueno, allí mismo, en el cielo. Muy pocos pensaban en las consecuencias de estas negociaciones, ya que los más, siempre habían pensado con estar en el primer mundo, donde las grandes convenciones, asociaciones paraeclesiásticas parecían manejar todo, de manera que la eficiencia y los resultados venían de la mano de la competencia o de la lucha por ser el mejor.
Como yo estaba fuera de la escena, comencé a imaginarme lo que pasaría cuando el superministro lograra privatizar la puerta del cielo. Enseguida pasó por mi mente lo que había leído en la historia de la iglesia sobre las indulgencias y otras concesiones, dinero u ofrendas mediante.
Y..¿si al superministro, o a sus amigos beneficiados por la privatización se les ocurriera utilizar todos sus poderes para atraer al mundo, diciendo mediante la publicidad o la propaganda que, solo la iglesia X, por supuesto la de él o la de sus amigos, se consideraba la única entrada al cielo?
Pensé rápidamente que todos quedaríamos necesariamente atrapados y fascinados frente a tal iglesia o corporación, y al poder que ella detentaría y demostraría…
¿Y que sería entonces de las PIMES (Pequeñas Iglesias con Menos Espíritu Santo)?
No, no podría ser cierto lo que estaba viendo. Pensé en la corrupción que se extendería por el cosmos, y en los pequeños pueblitos del planeta Tierra, donde dos o tres se reunían en Su Nombre. ¿O acaso no pasó así en aquel ignoto país que mencioné antes? Detrás, en el medio, antes y después de cada privatización, siempre estaban los parientes, los amigos, casi siempre superpoderosos, con toda suerte de complicidades arreglos, sobornos, etc. etc.
Comencé a agitarme. Quería advertir al Señor para que no lo permitiera, que destituyera pronto al superministro, que volviera pronto todas las cosas a la época en que todos los creyentes éramos iguales y podíamos tener libre acceso a su trono, o en que cualquier pecador podía trasponer arrepentido la puerta del cielo con sólo mirar a Jesús con fe… esa misma puerta que ahora se quería privatizar… y en mi excitación, cuando ya estaba a punto de gritar, me desperté del sueño.
Esteban Dido
Muy buena, asi estamos todos en estos momentos, creemos que todo se puede producir negocios, el mundo y tambien los que nos creemos cristianos queremos ganar dinero, estamos como en los tiempos antiguos, ante de cristo, que el perdon se gana por dinero y no por gracia como dijo el Señor.
Ojala despertemos a tiempo y nod demos cuenta que nuestra vida y salvacion es por gracias y no por obras.
Un fuerte abrazo para mis hermanos en cristo
Dios los bendiga
De no creer, ayer justamente mis pensamientos se dirigieron a que algunas asociaciones eclesiasticas evangelicas, tienen mucho de parecido al vaticano….. y cuando leí esto me di cuenta que al unico que debemos creer es a cristo y no a los hombres.
Algunas veces no sé porque a las personas les cuesta creerle al Señor; la gente huye cuando se le quiere compartir las nuevas de Salvación, aún nosotros también lo hacemos cuando nuestras obras no son lo que es verdadero. Dios tenga misericordia de todos nosotros los que estamos aquí en la tierra.
Ayer justo pensaba como sería el cielo, si la palabra dice: «Cosas que ojo no vio» debe ser lo más excelentemente creado.
Mil gracias ART.
ENTRAR AL CIELO ES ALGO QUE TIENE SU CONDICION PARA LOS QUE CREEN Y NO SOLO ESO SINO ESTAR `PREPAADO COMO LOS DESCRIBE MI SEÑOR EN LA PARABOLA DE LAS 10 VIRGENES NO TODOS ENTRARA
muy buen…. me parece fantastico y aun mucho mas que eso ojala podamos ver nuestros errores y corregirlos D.B.T
hola!! hermanos en el señor, no se si talvez hoy sea muy tarde para poder decir esto , pero justo hoy me encontre con esta pagina… y me parecio interesante los temas y el contenido que en ella hay, pero me duele mucho en mi corazon , que a pesar de ser parte de una escuela biblica , que deberia enseñar temas teologicos, hermeneuticos, apologeticos y cristo-centricos , sea una pagina tan anti-pentecostal….
y porque me duele tanto, es por que yo pertenesco a una iglesia de corte pentecostal y hoy las nuevas generaciones estamos llevando la dentera de nuestros padres , pagando sus errores y cargando el estigma de la ignorancia por la falta de dialogo.
conosco muchos ministros en el señor y no son pentecostales pero al conocernos nos damos cuenta de que talvez vamos por diferentes lados de la acera.. pero siempre por el mismo camino.
perdonenme si todo esto es solo mi impresion y no se apega a la realidad!!!!
BENDICIONES!…..