Susan Drake es una mujer profunda y muy sencilla, que tiene menos de treinta años. Es menonita, funcionaria de los Estados Unidos, con responsabilidad ante las Naciones Unidas en relación a la Cumbre de la Tierra, Eco’92. Compartió con nosotros su experiencia como cristiana comprometida en este debate político de envergadura internacional y consecuencias planetarias.
P: ¿Cuáles fueron tus vivencias y desafíos como cristiana en este evento?
R: Me tocó trabajar en representación de los Estados Unidos durante las sesiones preparatorias de la Cumbre, en 1989, y luego en la reunión de Río. Mi percepción como cristiana, es que detrás de los debates ecológicos se libra una tremenda batalla espiritual. No puedo precisar concretamente cómo opera; en las sesiones preparatorias se percibía claramente el enfrentamiento que llamamos norte-sur; pero en realidad era mucho más que eso, era más que las naciones desarrolladas versus las no desarrolladas.
Había un espíritu de amargura, de ira, de resentimiento, una falta de flexibilidad de parte de ambos grupos de países, cada uno queriendo culpar al otro… estos sentimientos no pueden promover paz ni reconciliación, sino guerra. Creo que hay realmente mucha ira, no sólo entre los jóvenes sino entre los líderes políticos de los países. Es cierto que hay mucha retórica, pero el lenguaje que se usa dice más de lo que aparenta decir.
Tengo que decir que la convocatoria de la Cumbre fue persistentemente boicoteada, y sólo fue por la perseverancia de algunos de nosotros, que estuvimos ayunando y trabajando, que finalmente produjimos, con la participación de representantes de Canadá, Méjico, India, y algunos otros, una resolución que fue aprobada en las Naciones Unidas para convocar a la reunión de Río.
P: La imagen de los Estados Unidos no fue muy positiva durante el desarrollo de la Cumbre…
R: Creo que lamentablemente se hizo hincapié en la posición de los Estados Unidos respecto a la biodiversidad para crear la imagen de Estados Unidos como de una postura negativa en todo lo tratado en la Cumbre, cuando en realidad tuvo participación positiva en muchos capítulos, incluyendo la protección de los océanos, el rol de las ONG, el deber de informar a la comunidad, el desarrollo y el impacto ambiental. Estas contribuciones no se conocieron, porque la prensa enfatizó la postura de los Estados Unidos en relación al tema de la biodiversidad, y al hecho de que no apoyó la convocatoria de una convención sobre la biodiversidad, aunque la oposición se refería más bien a los términos de la resolución.
En realidad, a la vez que se critica a los Estados Unidos, y se le asigna la mayor parte de la culpa por el medio ambiente, los países en desarrollo quieren seguir recibiendo subsidios económicos; eso resulta incoherente. Tampoco es coherente la postura de los países desarrollados, que piden a las naciones en desarrollo que construyan sus economías sin degradar el ambiente, pero no les ofrecen la asistencia técnica para hacerlo. Lo cierto es que, en una buena parte de los debates de Río, la ira subyacente era tan grande, que no se llegaba a ningún acuerdo de resolución sobre los tópicos relativos al medio ambiente, sólo se ventilaba la ira.
P: ¿Tiene una explicación histórica?
R: Creo que detrás de las razones históricas y de los desacuerdos, hay una batalla de origen espiritual. Creo sinceramente que se requiere el poder de Cristo y de sus discípulos para quebrar esas fortalezas del mal que separan a los pueblos, en lugar de acercarlos. Yo esperaba que la Cumbre acercaría a los pueblos, pero quizás fui un poco ingenua en mis expectativas, porque cada país llega a la mesa de las Naciones Unidas con sus propios intereses y no con los del mundo como totalidad; hay contadas excepciones en lo que hace al medio ambiente, quizás particularmente en los países escandinavos. Cuando hay intereses particulares es muy poco lo que se cede para llegar a un acuerdo en función del bien común.
P: ¿Cómo sentiste tu lugar como cristiana en el contexto de tu propio país mientras trabajabas para la Cumbre?
R: Desde el punto de vista personal, como cristiana, me resultó muy difícil en mi propio país, porque no estaba de acuerdo con la manera en que se enfocaron los temas de la Cumbre de la Tierra. En el tema de la asistencia financiera para el desarrollo, por ejemplo, estaba de acuerdo con la posición tomada, pero no con las motivaciones subyacentes. Políticamente, se argumentaba la necesidad de proteger fuentes de trabajo y mantener la hegemonía económica, pero creo que esa no es la motivación correcta.
P: ¿Cuál sería una posición válida desde tu punto de vista frente a los países en vías de desarrollo?
R: Creo que, básicamente, no es dinero lo que necesitan los países en desarrollo, por lo que he podido aprender mientras trabajaba como misionera en algunos de esos países, como Chile, Kenya, la India. Lo que necesitan quienes han pasado mucho tiempo en la pobreza es: en primer lugar, a Cristo, y en segundo lugar, quienes han carecido totalmente de poder deben recibir poder para que crean en sí mismos y puedan levantarse ellos mismos del ciclo de la pobreza, y no que alguien de afuera venga a sacarlos. En realidad, los Estados Unidos han creado todo un sistema de dependencia, y los países están resentidos. Lo mismo ha ocurrido con el Banco Mundial; nunca va a resultar nada positivo de eso, si se les impide a los pueblos cortar con esos lazos de dependencia, y responder con sus propios recursos a sus propias necesidades y, desde el punto de vista cristiano, con el poder de Dios y del Espíritu Santo.
Los cristianos que trabajan en áreas de pobreza, deben procurar que las personas cambien sus actitudes a partir de un cambio espiritual profundo. No es dinero ni cosas materiales lo que deben dar; es darse a sí mismos para caminar con estos pueblos, para que [ellos] puedan superar sus circunstancias. Eso es lo que se requiere, ya se trate del medio ambiente o del desarrollo socioeconómico, que por cierto están muy vinculados. Cuando se hablan estas cosas a nivel internacional, y se discuten decisiones sobre fondos para asistencia del medio ambiente, siempre son soluciones producidas por el hombre, que nunca serán totalmente satisfactorias.
Creo que es importante que sigamos avanzando hacia una mayor cooperación, pero creo que la época en que los Estados Unidos podían y querían derivar sumas importantes para la asistencia a países en desarrollo, ya ha terminado. Aun internamente, se ha creado un círculo vicioso de dependencia, y la economía ahora ni siquiera cubre eficazmente el sistema de bienestar social. En algunas áreas donde nuestra iglesia está trabajando hemos encontrado generaciones enteras que no saben lo que significa trabajar, porque no lo han hecho ni siquiera un solo día en su vida, y han estado dependiendo enteramente del sistema de seguridad social.
No han trabajado nunca, nunca. Eso tiene que cambiar, por el poder de Cristo y por un cambio de actitud en nuestra manera de darles poder y dignidad frente a sus propias circunstancias. Y es lo mismo en cualquier situación de pobreza. Es deshumanizante y desmoralizador sumergir a las personas en la dependencia. Sólo Cristo puede traer humanización en medio de situaciones de tanta deshumanización. La Madre Teresa de Calcuta nos da un ejemplo de cómo el amor de Cristo puede traer dignidad y humanidad en situaciones tan deshumanizadas como las que viven en Calcuta… ¡Esta respuesta ha sido un poco larga!
P: ¿Concluida la Cumbre de la Tierra, cuáles son los caminos para lograr el cumplimiento de las metas?
R: Lo primero que debe lograrse es que los gobiernos rindan cuentas respecto a los compromisos asumidos en la Cumbre. La única manera, o la principal de que los gobiernos cumplan sus compromisos es que los ciudadanos, los Organismos no Gubernamentales, tengan acceso al gobierno y le exijan información y cumplimiento. Esto, por supuesto, es más difícil donde no hay democracia. Pero es el punto de partida. Además, a nivel internacional, las Naciones Unidas deben pedir cuentas y supervisar a los gobiernos que la integran respecto a los programas derivados de la Cumbre.
El problema en este sentido es que la ONU está integrada por gobiernos, y éstos difícilmente van a criticarse a sí mismos, salvo que unos critiquen a otros. Pero si logramos implementar estos dos enfoques, tendríamos complementariamente desde abajo y desde arriba un control del cumplimiento de las medidas resueltas en la Cumbre.
P: ¿En qué items crees que hay mejores perspectivas de avanzar hacia soluciones?
R: Uno de los temas en los que se progresó mucho fue el del manejo de los deshechos y tóxicos químicos; se subrayó la obligación de los gobiernos de informar a las comunidades sobre los deshechos en el área -claro que aquí aparece otra vez la incidencia de la democracia o ausencia de ella. Japón fue uno de los países que más obstaculizó esta resolución, y aunque finalmente el lenguaje en que se formuló es un tanto débil, al menos está.
Es decir es más que una mera recomendación, y tiene el carácter de resolución, y debe ser implementada por las agencias de la ONU. Pero en otros temas, es cierto que sólo se produjeron recomendaciones. Y ahí es donde resulta decisivo que las comunidades exijan la rendición de cuenta de sus respectivos gobiernos.
También hubo bastante avance respecto a la protección de los océanos, y una convocatoria a una convención sobre lluvia ácida y sobre el cambio climático de la tierra, aunque no hay precisión respecto a cómo se va a implementar esa convención. Algo que me preocupa es que muchos países europeos han dado su acuerdo a resoluciones que les va a ser difícil, cuando no imposible, llevarlas a cabo.
P: ¿Y los temas menos resueltos?
R: Dos temas esenciales en los que se requiere más negociación internacional son la deforestación y la biodiversidad.
P: ¿Qué aspectos positivos destacarías de la Cumbre?
R: Creo que un aspecto muy interesante de la Cumbre ha sido el papel importante que ha adquirido la ONG en el desarrollo e implementación de la Agenda 21: desde los industriales hasta los agricultores, pasando por las organizaciones laborales, femeninas, ambientales; se les ha abierto espacio y se ha debatido su rol en relación a los gobiernos respecto al desarrollo y al medio ambiente. Creo que este campo va a extenderse mucho en el futuro.
P: ¿Cuál consideras que es el rol de las iglesias locales en relación a los desafíos surgidos en la Cumbre?
R: Creo que hay un rol importante que las iglesias deben cubrir en este terreno, y estoy entusiasmada por el hecho de que hay creyentes muy serios y profundos que están reflexionando sobre estos temas que tanto preocupan. Muchas de las personas involucradas en la Cumbre realmente pensaban que, si no se arribaba a una decisión ahora, el futuro del planeta estaba definitivamente amenazado. Había expectativas demasiado altas de parte de muchos de ellos, y quizás no era sano. La iglesia debe mostrar que el Señor sí se interesa por su creación, y que en las Escrituras encontramos valores y pautas que orientan hacia la búsqueda de soluciones para los problemas de todos los días. No vamos a encontrar en ella las soluciones particulares, pero sí los principios que orientan hacia las decisiones que permitan encontrar soluciones perdurables. Por ejemplo, en relación a los pobres. Es mi anhelo que la iglesia argentina esté unida y lleve adelante una agenda activa en este terreno, flexible a los nuevos conocimientos y a la creciente comprensión de la enseñanza bíblica, buscando respuestas a los desafíos actuales. Investigar, por ejemplo, el fundamento teológico para el mantenimiento de la biodiversidad. Es necesario ilustrar a aquéllos que toman las decisiones, respecto a lo que la Biblia dice, y cuál es la posición de la mayoría de los evangélicos frente a estos temas.
También creo que es el rol de la iglesia, hasta cierto punto, particularmente en países como Argentina, asumir un rol activo estimulando a la gente a una participación más directa en las decisiones de gobierno, y liderando el camino hacia una participación más democrática. Si la iglesia no asume su responsabilidad, quizás se tomen otros caminos, porque cuando falta verdadero amor y compasión, aparece la violencia.
ORGANIZACIÓN MUNIDAL MUTUAL
DE PUEBLOS Y NACIONES DE DIOS
UNIVERSIDAD MUTUAL DE LA VIDA
LA SABIDURÍA Y LA CIENCIA DIVINA.
Es el Tiempo de reflexionar sobre todo lo que hasta el día de hoy, hacen los capitalistas salvajes,
Que de una forma y otro, buscan sus propios intereses, sin impórtale lo que le pasa a la Creación y ene especial a los seres humanos, que por millones mueren por los múltiples fenómenos que se producen, por la contaminación que se genera, en las grandes industrias, plantas, empresas y producciones masivas de contaminadores, tanto en las ciudades como en el campo, como los múltiples venenos y químicos que se esparcen en los cultivos, las muchas expulsiones de contaminantes, que salen de los autos, de las chimeneas y los muchos desperdicios tóxicos que ambulan por todas partes y las muchas cosas que se camuflan, manipulado la destrucción de la naturaleza con falsas licencias de control ambiental, donde se talas millones de árboles de todas las especias.
Es el Tiempo de asumir la responsabilidad, que nos compete, por ser los pobladores, que nos beneficiamos, de tan Hermosa Creación, que nos fue dada por Dios nuestro Padre.
Es el Tiempo de confrontar a todos los que intervienen en contra de la creación, denunciándolos, no comprando sus productos, no apoyando a los políticos que hasta el día de hoy se hacen los indiferentes y trabajan para los que los financian en sus carreras corruptas y personalistas y demás empresarios que camuflados he hipócritamente actúan.
Es el Tiempo de que los Verdaderos Hijos de Dios, los que han alcanzado Santidad y están bajo la Gracia Divina, tomar el control Espiritual, Material y Físico de la creación, es Voluntad y mandato de Dios, que lo hagamos.
El cambio climático y la afectación de toda la Creación, y las muchas aberraciones que se manifiestan en toda la creación nos afecta a todos
1. CON COOPERACIÓN Y SOLIDARIDAD MUTUAL PODEMOS MITIGAR SUS EFECTOS
2. Un hecho Espiritual, Material y Científico; que viene impactando a la comunidad internacional desde hace algún tiempo, tiene que ver con las alteraciones del clima, por la pésima administración del hombre codicioso, avaro, idolatra y vanidoso, que en busca de las riquezas personales, para sostener su propio pedestal, a arremetido contra toda la creación, explotando sus recursos no renovables, sin escatimar el efecto contrario que hace en contra del medio ambiente, como la producción de millones de carros pensando solamente en las utilidades personales sin calcular un limite, para controlar sus efectos invernaderos, es por esto, el aumento en las concentraciones de ciertos gases, los cuales retienen grandes porciones de radiación terrestre (efecto invernadero), provocando a su turno el calentamiento global y sus efectos colaterales.
3. Los gases de efecto invernadero son principalmente el dióxido de carbono, el metano, el bióxido de carbono, los óxidos nitrosos y los clorofluorocarbonos, sustancias contaminantes que son producidas principalmente por las plantas de generación de energía a base de carbón y por los automóviles y otros.
4. El calentamiento global acarrea consecuencias irreparables como el derretimiento de glaciares; sequías y escasez de agua; huracanes; ciclones; olas de calor, entre otras.
5. Ahora más que nunca es necesario el respeto por la creación, que Dios, nos a encomendado su Administración, y los que somos sus hijos, debemos de tomar el control de las instituciones que regulan todas las actividades, para proteger la naturaleza y el medio ambiente. la Solidaridad Mutual y/o la cooperación, entre Hombres Cristianos de Honor, es necesaria ahora, dando cumplimiento a los designios y mandatos de Dios, Señoreándonos sobre todo lo creado, tomando la autoridad que nos corresponde y cuidando cumplir con todas las cosas que sean necesarias para la Restauración del Paraíso. Destruyendo cualquier contaminación que afecte el Mundo espiritual y su Relación con el mundo material y los efectos que ello genera, con el mundo físico y sus correspondientes leyes Espirituales, leyes Materiales y sus leyes Físicas, para que pueda existir una perfecta armonía en todo lo creado y así ordenar toda la creación, como lo fue al principio, antes del pecado del hombre, que hasta el día de hoy, toda la tierra esta desordenada por el hombre carnal y todo en la Creación esta vacía, (Génesis 1.2, sin la presencia de Dios, su Gloria que todo lo regula, todo lo estabiliza, todo lo hace y le da Vida perfecta. Es necesario que haya luz nuevamente y que todo vuelva a ser iluminado por Dios, como nos lo dice Juan 1.9
6. debemos de cumplir con las Obras Que Dios, preparo de antemano, para que al estar en ellas, podamos ordenar la creación, como esta Escrito en efesios 2.10, iniciado las actividades que sean necearías, para disminuir los efectos del calentamiento global y tomando el control Universal, de las empresas, controlando sus producciones, regulando así desde cualquier parte del mundo, todas las actividades, de toda entidad, empresa he industria, y unidos podamos, contribuir a reducir la contaminación, limitando todo exceso peligroso, es necesario, utilizar toda clase de controles técnicos, como los catalizadores en los escape, de los autos, reducir el uso de la energía eléctrica, usando al máximo la iluminación natural; disminuir el uso de gasoil, diesel o querosene, aumentando el uso de biocombustibles, controlar la emisión de gases dañinos en las industrias; adicionalmente, se pueden adoptar prácticas sencillas orientadas a reciclar y a usar racionalmente los recursos naturales; utilizando tecnologías limpias en la agricultura, para evitar la emisión de carbono, o participar en programas de reforestación o de conservación de determinadas zonas geográficas, por citar algunos ejemplos.
7. Son muchas las formas, en que debemos de actuar inmediatamente, para hacerle frente a estos fenómenos que derivan de la actividad humana. Es importante mantenernos informados y crear conciencia, con todos los asociados y grupos que hacemos parte de la Organización Mundial Mutual de Pueblos y Naciones de Dios, en toda la tierra, es importante que estemos integrados, para desarrollar estas importantes responsabilidades, que hasta el día de hoy, están a la deriva, para provecho de los capitalistas salvajes que están destruyendo la creación por sus intereses mezquinos, destruyendo la naturaleza y contaminando el mundo, en contra de la gran mayoría de los pobladores de la tierra, poniendo en riego todas las vidas humanas, es la gravedad del problema y las consecuencias que esto esta afectando que desde ya, nos sentimos responsables, y pedimos a Dios, nuestro Padre, a nuestro Señor Jesucristo, perdón por nuestra indiferencia, nuestra falta de erspeto por la creación y por las muchas inrresponsavilidades que hemos cometido, no solamente con la naturaleza, sino con la destrucción de millones de seres que diariamente mueren de hambre, de contaminación, de enfermnedades y de las muchas guerras patrocinadas por los codiciosos, para sustentar poderes temporales, asesinando millones de seres humanos y lo mas graves, el asesinato de millones de bebes, que mueren en los vientres de las madres, por consecuencia de la irresponsabilidad de millones de padres de familia, que por fornicar, se convierten en asesinos, esto y muchas cosas mas, son las que debemos de seguir pidiendo perdón a nuestro creador, por la pésima administración de nuestras vidas y de la Preciosa Creación, que se encuentra desornada por el hombre pecaminoso y vacía sin la presencia de nuestro creador, por consecuencias de los pecados de toda la humanidad
8. la Organización Mundial de pueblos de Dios, que esta integrada por todos los que de una y otra forma Buscamos servir en la Obra de Restauración del Paraíso que dirige nuestro señor Jesucristo, por medio de todos los que han alcanzado Santidad y están bajo su Gracia y su Gloria Divina, «INVITAMOS MUTUALMENTE» a toda la Humanidad, que tomemos conciencia de lo que estamos haciendo en contra de la Creación, que se le salio de las manos a los codiciosos y los capitalistas salvaje que hasta el día de hoy, han manejado pésimamente toda la creación. Debemos de seguir Uniéndonos en contra de todo aquel que atenta contra nuestra Creación, en cualquier parte del mundo, es por esto que todos los Cristianos de la tierra, nos declaramos protectores de toda la Creación, contando con el respaldo y la aprobación de Dios, nuestro Padre y de la Gracia de nuestro señor Jesucristo, en todo lo que hagamos. Desde ya, participamos en todos los proyectos y programas de beneficio para el planeta tierra y todos sus habitantes, en el que vivimos, que es el hábitat de las generaciones, que habitaran en el Paraíso que Dios nuestro Padre, esta Restableciendo, como lo promete en el libro de Daniel 2-44, donde todo es hecho nuevo sin maldiciones, sin muerte espiritual, sin plagas, sin enfermedades, sin pobreza, como nos lo promete, en efesios 2.10, Apocalipsis 21 y Apocalipsis 1.1-2-3.
Cordialmente
UNIVERSIDAD MUTUAL DE LA VIDA
LA SABUDURIA Y LA CIENCIA DIVINA.
Filial de la Organización Mundial Mutual de Pueblos y Naciones de Dios
universiadmutual@hotmail.com
misioncristal@hotmail.com
cooporacionmisioncristal@hotmail.com
HERMANOS. DIOS LES BENDIGA, LE SALUDO DESDE VENEZUELA..Y CON GRAN PREOCUPACIÓN, EN NUESTRAS IGLESIAS, APENAS SE TOCA EL TEMA SOBRE EL ROL, QUE DEBEMOS JUGAR LOS CRISTIANOS EN LA CONSERVACIÓN DEL PLANETA, ME REFIERO A NUESTRAS IGLESIAS EN VENEZUELA, YO FORMO PARTE DE UNA IGLESIA EN MÉRIDA. VENEZUELA, Y EL SEÑOR HA PUESTO EN MI CORAZÓN, REALIZAR ACTIVIDADES, QUE PROPICIEN CUIDAR NUESTRO ÚNICO PLANETA, EN ACCIONES LOCALES Y NACIONALES, POR FAVOR QUISIERA TENER MAYOR CONTACTO CON USTEDES A TRAVÉS DE MI CORREO, SE LOS AGRADECERÍA MUCHISIMO. ADELANTE SIN DESMAYAR, ESTAMOS HACIENDO LO QUE ES AGRADABLE A NUSTRO SEÑOR, Y A LA PRESERVACIÓN DE LAS GENERACIONES FUTURAS. MIL GRACIAS Y BENDICIONES. HNA MARIA LUISA ALVARADO