LA ORACION CRISTIANA
Desde tiempo inmemorial se dice que «la oración es la respiración del alma». Es la energía del cielo que vigoriza el corazón. O. Hallesby dice que «Dios ha designado la oración como un medio de íntima comunión entre él y el hombre».
R. Rinker afirma haber descubierto que «el verdadero propósito de la oración es poner a Dios en el centro de nuestra atención y olvidarnos de nosotros mismos».
Por su parte R.A. Torrey recuerda que aquellos hombres que Dios puso como modelo de lo que el cristiano debe ser -los apóstoles- «consideraban la oración como la ocupación más importante de su vida».
Hablando de la oración con relación al predicador, E.M. Bounds expresa que «el cuarto de estudio de éste ha de ser un altar, un Bethel, donde le sea revelada la visión de la escalera hacia el cielo, significando que los pensamientos antes de bajar a los hombres han de subir hasta Dios». Pues «cuando el predicador tiene el camino abierto hacia Dios, con toda seguridad lo tiene abierto hacia el pueblo».
Frente a esas consideraciones ¿Cuál es nuestra experiencia personal?, ¿cuál es el fruto de nuestro ministerio cristiano? y ¿cuál es el nivel espiritual de nuestra congregación?
En «Una oración de Solzhenitsyn » emociona comprobar que en la vida de este célebre escritor, su intimidad con Dios no pudo ser perturbada ni aun viviendo en un país cuyo régimen político se ha autodeclarado ateo. ¡Permita Dios que en el mundo haya muchos hombres de su temple!
En sus muchas prácticas reflexiones que titula «Sea Breve «, Alec Clifford anima a orar en público aunque «sea breve», a muchos hermanos que por ignorar el «dialecto de Canaán» o de presumir que es necesario hacerlo largamente, optan por quedar callados. Pero el tema puede ayudar también a los «oradores» del otro extremo, a los que tal vez «piensan que por su palabrería serán oídos». Para los tales la recomendación es igualmente útil: «Sea Breve».
«La Oración, ¿Monólogo o Diálogo? de José Young enfoca cinco interesantes aspectos de esta antigua cuestión, siempre muy actual. Realmente lo que importa, no es lo que pensemos acerca de la oración, sino cómo la practiquemos. ¿Hemos meditado seriamente alguna vez cuánto perdemos por seguir equivocadamente el camino? Porque casi todos sabemos que según la mayoría de los casos es simplemente un monólogo.
«Recuerdo haber orado » trae recuerdos en la vida de Samuel Escobar que nos llenan de emoción y nos hacen revivir dulces experiencias de nuestra propia vida de oración. Resulta impactante la visión de la muchedumbre en el aeropuerto de Heatrow que parece inalcanzable para el evangelio. Sólo nos tranquiliza pensar que Dios ama a cada uno y «no quiere que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento». De alguna manera que ignoramos -los caminos del Señor son inescrutables- la abundante Gracia de Dios dará la oportunidad de alcanzar la salvación. En cuanto a nosotros, somos responsables del rincón en que Dios nos ha colocado.
En «La Oración de Fe «, Colósimo nos coloca frente a lo que naturalmente debiera ser nuestra actitud cuando oramos: una experiencia de fe. Pero debemos admitir que demasiado frecuentemente la oración representa para nosotros un acto religioso. Si la oración llegara a ser para nosotros un auténtico acto de fe, toda nuestra vida sería cambiada.
«¿Oran los Hombres Hoy? » La oración es una amplitud natural del espíritu humano, de manera que en la experiencia de multitudes que no pretenden ser creyentes, hay momentos en que sienten el irresistible impulso de orar. Sin embargo, ésta no es la oración cristiana, pero puede ser el punto de partida que despierte inquietudes espirituales serias en los hombres.
En «Oraciones Escritas «, Zandrino expresa en una plegaria ferviente el deseo de que el Señor le enseñe a orar, con el ánimo de que quienes lean su oración sean impulsados también a manifestar a Dios el mismo deseo.
En «Una Oración Atrevida «, Israel García presenta varias escenas bíblicas en las que aparece ilustrada con todo su dramatismo la verdad de su reflexión: «Dios puede llamar las cosas que no son como si fuesen y las que son como si no fuesen».
Querido lector: al dejar este número en tus manos, lo hacemos con el vehemente deseo de que su lectura te estimule a practicar más intensamente la oración, pues como bien lo dice Samuel Escobar en «La Oración y los Libros «, «no se aprende a nadar en un manual de natación».
Tambien puedes leer estos estudios biblicos sobre la oracion:
La oración, su poder y sus efectos
gracias dios los siga bendiciendo asi como yo soy bendecida atra vez de estos escritos dios siga bendiciendo a estod escritores amen.
Doy gracias por los mensajes y enseñanzas tan hermosas que DIOS le inspira. Les bendigo inmensamente porque sus consejos llegan en el momento apropiado.
Quiero hacerles unas consultas sobre la oración
por ejemplo cómo y cuando orar??
Si es cierto como me han dicho algunos lideres de la iglesia a donde asisto que las oraciones hechas , por ejemplo cuando se camina por calle, no son efectivas, es decir que DIOS no las escucha y no puede responderlas, porque a mi me gusta caminar mucho desde la casa al trabajo o viceversa, tambien camino ida y vuelta a la iglesia. Mi inquietud y por eso les pido su consejo , si eso es cierto??? Pues me gusta orar mientras camino.
DIOS los bendiga y siga iluminandolos co tan sabios consejos
Muchas gracias.
es verdad pues habemos gente que solo oramos ,pero lo importante es que esa oracion sea de olor fragante a Dios, gracias por hacerme reflexionar e la oraciòn.
la oracion el poder el arma mas poderosa del cristiano ,,,hacerla como un estilo de vida.. dia con dia.. al el dios triuno .hablandole diciendole pidiendole agradeciendole y todo es el
EL SEÑOR LOS SIGA BENDICIENDO CON SUS MENSAJES Y ENSEÑANZAS.
La oracion es el alimento del alma que clama por ser alimentada, porque el ser humano,por su condicion de cratura, requiere de ser alimentado para sobrevivir,no es autosuficiente a pesar de que el egoismo asi se lo haga sentir, siempre, tarde o temprano tendra hambre de entablar comunicacion con su Creador, siendo la oracion el medio para hacerlo .
Por lo anterior por mas sabio o msterialista que pretenda ser, llegara el momento en que reconosca su necesidad de entablar una relacion con Dios