…y los cuervos vinieron
UN NUEVO COCHE BÍBLICO
Fue en 1920, cuando Nicolás y Langran, recibieron el nuevo coche a motor. Se trataba de un Ford último modelo, al que se había adaptado una carrocería del tipo de la del coche a caballo. Esto representaba un coche excesivamente pesado en relación con la potencia del motor, lo que lo hacía lento y difícil de maniobrar cuando llovía y se formaban pantanos.
No obstante, significaba una gran ventaja en relación con el viejo coche, sobre todo, por no tener que dedicar tanto tiempo al cuidado de los caballos. Para su época, era un coche extraordinario, que llamaba la atención por todas partes, pues no se veían muchos vehículos así en los caminos del interior. Y positivamente la obra se agilizó con la utilización del nuevo coche.
Nicolás se propuso recorrer cada camino que saliera de Bell Ville, predicando el evangelio tan minuciosamente como le fuera posible, hasta una distancia de diez leguas a la redonda. Trató que dentro del círculo de cincuenta kilómetros de radio, las poblaciones, los caseríos, y aun las chacras y estancias fueran evangelizadas. El nuevo Ford a bigotes, resultó un elemento decisivamente útil para cumplir esta meta.
Parte de esta labor la comenzó a cumplir con la americana y con el coche bíblico a caballos. Pero ahora con el automotor, pudo en tres años realizar una tarea especialmente extensa. Aunque nunca sacrificó del todo el trabajo intensivo al extensivo; y en cualquier lugar en que encontrara interés por la Palabra, allí se detenía el tiempo suficiente como para dejar algún creyente, o grupo de creyentes, bien afirmados en la fe, a los que se preocupaba en continuar visitando.
Así nacieron iglesias en las poblaciones circunvecinas, y algunas en las chacras. Creyentes de pequeños grupos, que se reunían en estancias o chacras, se trasladaron posteriormente a poblaciones vecinas, y fueron núcleos sobre los que se dasarrollaron iglesias vivas.
Pero no debemos olvidar las penurias propias de una época, en la que todos los caminos eran de tierra, las pinchaduras y roturas de neumáticos eran incidentes corrrientes: pero armar una llanta era todo un trabajo bien complejo en relación con cambiar simplemente una rueda armada, como se hace hoy. Los pantanos en tiempos de lluvias, hacían intransitables los caminos, de tal manera que, aunque positivamente con mayor comodidad que con el coche a caballos. Recordemos que entonces no era como viajar en la actualidad en un furgón provisto de un motor de 200 HP, andando por caminos pavimentados.
Aun la provisión de nafta requería precauciones, ya que no había surtidores en los pequeños pueblos que visitarían. Era necesario llevar combustible, que venía envasado en latas de 20 litros, dos de las cuales estaban embaladas en un cajón. Amén de la falta de talleres para composturas, en aquellos polvorientos caminos.
REMEMORANDO EL PASADO
Para resumir este relato, dejaremos la descripción cronológica del trabajo misionero de Nicolás Doorn, ya que nuestro propósito ha sido compaginar la historia antigua, aportando muchos datos que recibimos directamente de apuntes y cintas grabadas dejadas por don Nicolás, que a nuestro pedido, frecuentemente nos relataba historias de su ministerio como evangelista y pastor. Así, al preguntarle sobre cómo iba resolviendo sus problemas económicos en aquellos primeros tiempos en que no realizaba trabajos remunerativos, nos contó lo siguiente:
¿Y SI NO VIENEN LOS CUERVOS?
«Ustedes recordarán que les conté de un primero de mayo de 1906 en que viajaba con don Guillermo Payne en un tranvía en Buenos Aires. Entonces decidí dedicar toda mi vida y todo el tiempo de cada día al servicio de Dios. Mi querido maestro, Payne, supo infundirme la suficiente confianza en el Señor, como para que nunca más me preocupara «por si no vinieran los cuervos a traer el alimento cotidiano».
«Nunca supe lo que pudo ocurrir entre bambalinas. Tengo para mí que Payne habrá hablado a iglesias en Gran Bretaña, y al fondo misionero de Bath, por mi sostén. Jamás me dijo nada al respecto. Pero desde 1907 comencé a recibir cheques que representaban donaciones de iglesias, enviadas por medio de «Echoes of Service», y también del fondo misionero Nacional y Extranjero de Glasgow, Escocia».
«Con mucha emoción, enviaba mis cartas de profundo agradecimiento por la ayuda recibida de hermanos que desconocía, y que se preocupaban por mí y mi familia.
Desde entonces hasta hoy (1960), la fidelidad de las iglesias de Gran Bretaña que se ocuparon del sostén de mi familia, ha comprometido mi más profunda gratitud. Yo era holandés de nacimiento y argentino por adopción, y aún durante las dos grandes guerras mundiales que soportó el Reino Unido, jamás faltaron las contribuciones que invariablemente cada diez semanas nos llegaban de Bath, además de algunos cheques de Escocia, de donde las donaciones que recibíamos eran eventuales, pero siempre las recibíamos en momentos muy críticos».
«Nunca tuvimos abundancia. Aprendimos a vivir muy sobriamente, y aún a compartir lo poco que teníamos con quienes nos rodeaban y necesitaban más que nosotros. Por supuesto que no resiste al análisis meramente humano, la manera cómo siempre disponíamos de lo necesario, por ejemplo para el uso del coche bíblico, tanto del Ford T de 1920, como del Ford A de 1928 que nos fue provisto después. Los gastos de combustibles, neumáticos, taller, representaban siempre sumas de dinero que superaban por mucho lo que recibíamos para gastos. Dios siempre fue fiel, al punto que pudimos trabajar despreocupados del dinero. En una chacra, nos regalaban una lata de nafta de 20 litros, en un pueblo nos proveían de nuevos neumáticos, en otro nos ayudaban con los gastos del taller. Las experiencias relativas al cuidado material que nos brindó el Señor, fueron un milagro permanente de su amor y del cumplimiento de sus promesas».
UN REGALO INCREÍBLE
Los hermanos mayores recomendaron a Nicolás, en el año 1923, la necesidad de que hiciera un viaje a Gran Bretaña con su familia, y que permaneciera un tiempo allí, visitando las iglesias, de manera que quienes estaban contribuyendo tan generosamente a su sostenimiento, llegaran a conocerlo personalmente. En la oportunidad que decidió realizar el viaje, tenía 27 años, una esposa y dos hijas, y pronto tuvo también el dinero suficiente para pagar los pasajes en una empresa naviera de barcos de carga, cuyos propietarios eran creyentes, y hacían precios muy bajos a los misioneros. A finales de 1923 se embarcó la familia rumbo al viejo continente, y en los planes originales estaba el de pasar algunos meses en Gran Bretaña.
Pero las circunstancias lo obligaron a permanecer un año y medio, y fue realmente una oportunidad magnífica. Él siempre consideró que le había sido brindada por el Señor, la de pasar ese tiempo visitando iglesias y conociendo nuevos hermanos y recibiendo continuamente pruebas del amor de Dios, y de la familia de Dios.
Un día, en una iglesia en Inglaterra le dijeron que estaban dispuestos a contribuir con la suma necesaria para pagar la mitad del costo de un automóvil. Esto conmovió profundamente a Nicolás. El contó así su experiencia:
«Antes de salir de la Argentina, yo había comenzado a pensar en lo valioso y práctico que me resultaría tener un automóvil, para no utilizar el pesado coche sino en oportunidades especiales.
Al contar ahora con pequeños grupos de creyentes diseminados en un extenso territorio, pensaba en la bondad de disponer de un automóvil en el que ágilmente podría cubrir las distancias. Pero claro, desde el comienzo, me daba cuenta que era una idea descabellada que debía desechar. En 1923 no eran muy numerosos los propietarios de automóviles en la Argentina. Sin embargo, cuando en esa iglesia me hicieron un ofrecimiento tan concreto, tuve la convicción de que Dios quería que tuviéramos un automóvil, y que por lo tanto, de alguna manera nos lo daría».
«Antes de regresar, tuve una invitación de varias iglesias de los Estados Unidos para visitarlos, lo que me sorprendió sobremanera, ya que no conocía a nadie de los que me escribieron y enviaron el dinero para el pasaje, ni sabía que ellos pudieran conocer mi existencia siquiera. Y fue magnífico conocer el gran país del norte, visitar varias iglesias predicando, y dando informes acerca de la obra en la Argentina, por la que evidentemente había mucho interés allí.
Poco antes de regresar a Inglaterra, el hermano en cuya casa estaba alojado, me preguntó si no me sería útil tener un automóvil para intensificar mi trabajo, porque en el caso de que así fuera, si es que yo podía completar la suma necesaria, él me daría en efectivo, el equivalente a la mitad del valor de un automóvil nuevo. Ustedes pueden imaginarse mi alegría y la gratitud a Dios por su maravillosa manera de obrar. Entre lágrimas, apenas si podía contarle que una iglesia en Inglaterra me había prometido «medio auto», que con la oferta de él, quedaba solucionado el problema».
«Regresé a Gran Bretaña, y de allí volvimos con mi familia a la Argentina, en el año 1925. No sé si ustedes pueden darse cuenta de la emoción que tenía cuando en Buenos Aires fui a una agencia de automóviles, y elegí un Ford último modelo, de capota rígida y vidrios levadizos ¡una novedad! que representaba una comodidad extra, y cuyo importe pude pagar en efectivo con las dos ofrendas».
«Con la decisión de un veterano, subí a mi nuevo Ford a bigotes, y salí de la agencia. Pero había hecho un par de cuadras, cuando las piernas comenzaron a temblarme de tal manera, que tuve que arrimarlo al cordón de la vereda y parar el motor. La emoción y la alegría eran demasiado grandes: elevé una oración de gratitud a Dios, y le dediqué el flamante automóvil. Debí esperar un tiempo hasta sentirme lo suficientemente tranquilo como para retomar la marcha.
Para entonces, el automóvil que había comprado no era común: la mayoría eran de capota plegable de lona, y podían cerrarse con cortinas también de lona.áÉste, en cambio, girando simplemente una manivela, levantaba los vidrios que daban protección del viento y la lluvia. Dios no solamente me había provisto de un automóvil, sino de uno especialmente práctico para la tarea que me proponía realizar».
«Efectivamente, pude utilizarlo por muchos años en viajes rápidos visitando a creyentes diseminados en el círculo de 50 Km.de radio con centro en Bell Ville».
…Por supuesto, hubo muchas más experiencias en la vida de Nicolás Doorn que no incluimos en este libro.
Rememorar el pasado en la vida de estos hombres de Dios, es una forma de renovar nuestras fuerzas para continuar con la extensión de Su Reino.
DIOS siempre nos sorprende con su mover!!!!!me conmueve la parte q el hombre de Dios. sale con su noticia q le van a suministrar su medio auto . y cuando sale atonito de la agencia a tal modo q no podia manejar!!!. yo quiero compartir un testimonio personal mio lo cual se asemeja a quedar atonito!!
yo hace mas de un año. me separe de mi esposa de una forma muy fea, sufri muchisimo, desprecios rechazos, amigos me dieron la espalda, pero siempre fiel a DIOS. Entre a trabajar a una empresa d ropa deportiva. al principio con un poco de temor, pero siempre confiando en DIOS, las cosas con mi ex empeoraban. un dia saliendo a trabajarde la empresa, veo a una chica sentada en el hall de espera para una entrevista de trabajo y yo la miro xq es muy bella, rubia con unos ojos hermosos. y me fui nada mas. Al tiempo me mandan a trabajar a un local de MORENO. y voy a trabajar y alli estaba la chica esta, trabajando!! de cajera en el local! de a poco comienzo entablar una conversacion .hasta q me da su celular y comenzamos a vernos. a todo esto siempre orando y pidiendole a DIOS q si esta su voluntad y bendicion se haga amen. lo interesante de esto es q hablando con ella me conto de su feo pasado. ella sufrio mucho con dos matrimonios q tuvo lloro mucho ya no tenia mas esperanzas. y lo bueno es q yo le dije q soy cristiano y voy a la iglesia y ella me dijo q tambien!! y me conto q el socio de su papa es casi ya pastor y le dijo q DIOS le iba a traer al verdadero hombre de su vida!!!!. a parte dijo q oro mucho x ese trabajo. y a mi me callo la ficha ahi de q DIOS NOS ACERCO a ambos!!!! y me senti atonito no me podia restituir de esa super noticia de bendicion nosotros oramos x ella q si era la mujer q DIOS tenia para mi q se haga!!!! y DIOS VEINE SIENDO FIEL YO VOY despacio con ella y orando x ella se q va a ser mi esposa DIOS me lo confirmo ella dijo q quiere adorar a DIOS. para mi fue lo mejor xq es una mujer maravillosa, muy hermosa. y lo bueno de conocer al Señor como es su misericordia su bendicion y como nos da mas abundantemente de lo q pedimos!!!!! soy GUSTAVO LEDESMA HIJO DEL DIOS ALTISIMO AMEN
Me alegro mucho cuando uno lee vicencias de como Dios rsponde y siempre el tiene las bendiciones para sus hijos, esto ayuda a la fe y esperar sempre en sus promesas, algun dia les contare mis experiencia y vivencias de como Nuestro Dios nos bendice y nos guarda.
Muchas bendiciones y Dios guerde a sus hijos
Muchas bendicones
hoy creo mas y mi Fe continua alimentandose de estos prodiguios de mi dios siempre eterno y bueno Jehova.el siempre con nosotros sabe lo que nesecitamos y escudriña nuestros corazones, si le somos fieles el abre las finazas de los cielos para sus Hijos esa es su promesa eterna y el simpre cumple sus promesas, Hermanos Dios dice que el esta con nosotros andemos en sus caminos y principios que el se encargara de nuestras proviciones y hara milagros hoy en nuestras vidas.
compartamos la palabra de Dios que es fiel y verdadera muchas Bendiciones a todos.